Lo que no se dice de las pensiones patronales rebajadas por el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social es que en el año 2008, con el propósito de reducir personal, ofreció ese tipo de prestación hasta por un monto mensual de $ 800 a quienes se acogieran a la jubilación patronal dejando vacante su puesto de trabajo; nadie que cumplía con los requisitos dudó en aceptar tan atractiva oferta que se trataba de una trampa, como los contratos que incluyen cláusulas con letras extremadamente pequeñas para sorprender a la otra parte contractual.
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